Parece que ha llegado el tiempo otoñal y aunque hasta el momento las temperaturas no son muy bajas ya va apeteciendo sentarse a la mesa y tomar un plato de cuchara.
En este tiempo, suelo preparar un día a la semana, un plato de legumbres, judías, garbanzos o lentejas.
Había comprado unos garbanzos de Pedrosillano y los puse en remojo para hacerlos de esta forma, pero no conté con una incidencia, y es que no me acordé que, para el día que tenía previsto hacerlos, cortaban la luz para mejora de la línea y como todo lo que tengo en la cocina es eléctrico aquí me tenéis a las 13.15 horas, hora en que se reanudó el servicio sin poder hacer nada. Menos mal que siempre hay algún bote en reserva y eso fue lo que hice, sustituir unos garbanzos por otros ya cocidos. Al final todos comimos y además a su hora, como está mandado.
Aquí os dejo como los he preparado.
Garbanzos con chorizo y jamón york
Ingredientes
2 botes de garbanzos cocidos
1 patata mediana
4 chorizos de guisar
150 gr de jamón york en filetes
1 cebolla
2 tomates maduros
1 huevo duro
pimentón
aceite
azúcar
sal
Preparación
En un cazo con agua, sal y un poco de vinagre cocemos el huevo unos 8 minutos. Refrescamos con agua del grifo y dejamos enfriar. Una vez frío quitamos la cáscara, lo partimos y lo desmenuzamos con la ayuda de un tenedor.
En un cazo ponemos agua a calentar, cuando empiece a hervir apagamos, echamos los tomates a los que previamente hemos hecho unos cortes en forma de cruz en la parte opuesta a la base y los escaldamos un par de minutos. Sacamos, los dejamos enfriar, los cortamos y los trituramos. Reservamos.
En un escurridor ponemos los garbanzos y los lavamos con agua del grifo.
Pelamos, lavamos y rompemos la patata.
Picamos muy fina la cebolla.
Troceamos los filetes de jamón york y cortamos los chorizos en rodajas.
Sofreímos en una cazuela con muy poco aceite la cebolla. Cuando transparenta incorporamos el jamón york troceado, rehogamos y agregamos el tomate triturado, echamos una pizca de azúcar para quitar la acidez y dejamos que se haga. Apartamos del fuego y echamos una cucharada de pimentón, removemos bien para que no se queme, añadimos un vaso de agua y esperamos a que hierva, es el momento de incorporar los garbanzos escurridos, la patata y el chorizo cortado en rodajas. Cubrimos con agua y mantenemos en cocción a fuego suave unos 20 minutos. A mitad de cocción, si hace falta, añadimos un poco más de agua, sazonamos y espolvoreamos con el huevo desmenuzado. Agitamos la cazuela para que se mezcle todo bien y el caldo espese.