lunes, 20 de marzo de 2023

Alcachofas con morcilla sobre cama de parmentier

La semana pasada no publiqué ya que comenzaron aquí las fiestas y aprovechamos para huir de los petardos, tracas, mascletás y bullicio de gente. La tranquilidad se agradece.
Con la receta de hoy doy por finalizada la temporada de la alcachofa en este blog. Con esta han sido tres recetas con alcachofas las que he publicado en corto periodo de tiempo y como pienso que no es bueno atosigar con un ingrediente que, dicho sea de paso y a tiempo, no gusta a todos, aunque creo que están equivocados porque realmente está de vicio, dejo para la siguiente temporada, en el supuesto de que sigamos por estos lares, la inclusión de nuevas recetas de esta delicia vegetal como es la alcachofa.
En la receta que os propongo para hoy además de la alcachofa, va acompañada por una deliciosa morcilla de Burgos y ambas coronan a un rico parmentier.
El parmentier debe su nombre a Antoine-Augustin Parmentier, farmacéutico militar y agrónomo francés de mediados del siglo XVIII. Fue una de las personas que más hizo por defender y popularizar el consumo de la patata y su uso en la cocina.
El parmentier de patata es una crema de patatas, o puré de patatas, para degustar tal cual, como guarnición de otros platos o como base de diferentes elaboraciones.
Si le añadimos nata y mantequilla le darán un toque sensacional.

 Bodegón con alcachofas, flores y recipientes de vidrio.
Bodegón con alcachofas, flores y recipiente de vidrio. Museo del Prado
 
Hamen y León, Juan van der (Madrid, 1596 - Madrid, 1631)
A pesar de la brevedad de su vida, son muchas las noticias documentales que de él han llegado hasta hoy. Se sabe que era hijo de flamencos y que al igual que su padre pertenecía a la Guardia de Archeros, institución constituida por gentes procedentes de los Países Bajos que tenían como misión proteger al rey de España. A partir de 1615, año de su boda con Eugenia Herrera, perteneciente a una familia de escultores y pintores, ya trabajaba con un cierto éxito que da lugar a que cuatro años después, en 1619, comience a recibir encargos procedentes de la Corte. Realizó pintura religiosa, prácticamente desconocida hoy, y también ejerció de retratista. No obstante, su fama se debió a sus naturalezas muertas, tanto bodegones como floreros, cuya fuerte demanda le obligó a tener un taller en la calle de los Tintoreros. Como pintor de flores en la década de los años veinte fue el mejor representante del género en Madrid.
El motivo principal de este cuadro, un gran jarrón de cristal con flores, está acompañado de un jarrón más pequeño, igualmente de cristal, con rosas de color rosa, situado en un plano superior. El jarrón más grande se impone sobre dos cabezas de alcachofa y sus hojas, ofreciendo un intencionado contraste entre estas dos caras de la Naturaleza; la belleza de las flores queda realzada por la presencia de las verduras más vulgares que aparecen debajo de éstas, y los sentidos de la vista y el olfato se oponen al sentido del gusto. Las flores están ejecutadas con la delicadeza habitual del artista; cada una de ellas ha sido pintada esmeradamente y para el modelado de los pétalos de rosa ha utilizado finas veladuras de laca roja sobre fondo blanco.
Una de las características de los bodegones de Van der Hamen, por la que más se le conocía, radica en su representación de piezas de cristal lujosas y caras, como las que aparecen en esta obra. Estos motivos, junto con el cuenco de cerámica de importación, confieren a la obra un toque de elegante refinamiento, muy a tono con el gusto de sus clientes, cultivados y pertenecientes a un distinguido nivel social. El artista ha captado con precisión los tallos y las hojas de las flores a través del cristal del jarrón, así como los reflejos de la ventana del estudio en la superficie y la luz que se filtra por el agua. La jarra de cristal verde, con su pie, constituye en sí misma un bello objeto de lujo, pero por su situación en primer término, justo encima de la firma del artista, representa también un reto del pintor a su capacidad para plasmar este material transparente y reflector.
Es un óleo sobre lienzo.
Sus medidas son Alto: 81 cm; Ancho: 110 cm
Pintado en 1627.
Número de catálogo P007907
Sala 008A.
Fuente: Museo del Prado

Alcachofas con morcilla sobre cama de parmentier
 
Ingredientes
4 alcachofas
1/2 morcilla de Burgos
4 patatas medianas
200 ml de nata para cocinar
30 gr de mantequilla
nuez moscada
sal
aceite de oliva virgen extra 

Elaboración
Limpiamos las alcachofas quitando las hojas exteriores más duras. Repasamos el fondo, cortamos las puntas y partimos por la mitad. Repasamos el tallo y cocinamos en la olla rápida, donde tenemos agua con sal, 4 minutos desde que asoma el segundo anillo. Dejamos despresurizar, abrimos la olla, sacamos las alcachofas, dejamos escurrir y  reservamos.
Para preparar el parmentier, pelamos y cortamos las patatas en trozos grandes y las cocemos en una cazuela con agua y sal hasta que estén tiernas. Las escurrimos y aún calientes las ponemos en el vaso de la batidora, añadimos la mantequilla a punto de pomada, una pizca de sal, un poco de nuez moscada y la nata. Trituramos todo hasta que quede una mezcla homogénea. Reservamos en caliente.
Pelamos y desmenuzamos la morcilla de Burgos. La salteamos a fuego medio, en una sartén con un poco de aceite. Sacamos y reservamos en caliente.
En esa misma sartén ponemos un poco más de aceite, si hace falta, y marcamos las alcachofas hasta que estén doradas.
Emplatamos colocando una cama de parmentier de patata, sobre ella una cucharada de morcilla salteada y coronamos con las alcachofas.

cama de parmentier
Alcachofas con morcilla sobre cama de parmentier
parmentier y morcilla de Burgos desmenuzada y salteada
Alcachofas con morcilla sobre cama de parmentier
con las alcachofas marcadas en la sartén
Alcachofas con morcilla sobre cama de parmentier
Espero que sea de vuestro agrado.

19 comentarios:

  1. Buenos días de nuevo Juan, hoy hago doble visita a tu espacio, no quería perderme tu reportaje sobre las Fallas, que por cierto me ha encantado.
    Este plato lo considero una riquísima receta, a pesar de su sencilla elaboración. Amén de no cocinar casi nunca con morcilla, no porque no me guste, sino porque me es de difícil digestión, lo comería con gusto, creo que en conjunto, junto a esa parmentier debe ser un bocado muy cremoso y suave, que invita a disfrutarlo.
    Aunque yo no como morcilla, en casa sí la toman, así que no sería mala idea sorprenderlos, especialmente a mi hermano que siente pasión por los alcauciles y la morcilla.
    Un abrazo y feliz semana.

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  2. Buenos días Juan!. Buen plato para despedir la temporada (como bien dices ) de las alcachofas, a mi me encantan aunque me repita.
    Me alegra hayas podido disfrutar de días de relax, la verdad es que se agradece la tranquilidad. Nosotros huimos también de todos estos eventos, además de mi pánico a los cohetes (por algo que me ocurrió de pequeña viendo un castillo y eso que estábamos alejados) lo paso fatal.
    Un abrazo.

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  3. Me cuento entre las afortunadas que les gusta la alcachofa, creo que es una verdura buenísima que se puede utilizar en cantidad de recetas. Nunca la he imaginado con una parmentier, aunque hervida con patatas y machacado todo después con aceite, vinagre y sal, nos encanta, pero con el puré es otra cosa. La morcilla tampoco se la he añadido nunca y mira que me gusta, mi debilidad es la de cebolla, pasada por la sartén está exquisita. Así que como verás, me llevo tu plato hoy para degustarlo con ganas.
    Y el cuadro me parece espléndido.
    Un beso.

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  4. Hola Juan.
    Coronas las jornadas de la alcachofa con una receta fantástica , pues con la morcilla y el parmentier la combinación ha de ser una exquisitez.
    Me imagino que por fiestas habrá muchísima gente y la verdad es que la tranquilidad y la vuelta a la normalidad siempre se agradece .
    El cuadro me parece muy bonito .
    Un abrazo y feliz dia.

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  5. Qué maravilla, me parece una delicia la combinación de sabores.
    Yo soy una fanática de las alcachofas, la pena es que a mi marido no le gustan nada, así que siempre ando buscando recetas que me sirvan para podérselas "vender", jajaja. Ésta es una de ellas, me la anoto.
    Yo también soy de las que huye de las fiestas y los petardos, te entiendo muy bien.
    Un abrazo.

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  6. Hola Juan. No me extraña que huyerais. Tanto ruido y tanta gente, agobia si no participas en las fiestas. Aquí se oye de lejos la fiesta en Sagunto, se agradece, la verdad.
    El cuadro es una preciosidad, me encanta el florero y como siempre, nos muestras arte que no conocemos y aprendemos en cada una de tus publicaciones.
    El plato es de restaurante de lujo. No te excuses, las alcachofas siempre son bienvenidas. Yo este año no he publicado ninguna receta, pero sí que las he comido asadas en la freidora, nada más.
    Un abrazo y feliz semana.

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  7. Parece que últimamente el Parmentier se ha puesto de moda, lo he visto en varios sitios.
    Por mi puedes seguir poniendo recetas de alcachofas, me encantan y esta tiene unos contrastes muy ricos.
    Bonito cuadro, me gusta ese fondo negro y el contraste colorido de las flores.
    Besos.

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  8. Estimado amigo Juan:

    Es un placer pasearme por tu cocina y por tu blog. Tiempo sin venir por aquí por causas ajenas a mi voluntad. Espero que estés muy bien y tu familia, también. Nosotros estamos bien, la familia, escapando.

    Este plato de alcachofas con morcilla tiene una pinta espectacular, traspasa la pantalla. Y con la buena materia prima que tienen por ahí, seguro que tenía un sabor espectacular, de chuparse los dedos.

    Me ha dado mucha alegría poderme pasar. Un abrazo enorme y feliz semana, amigo.

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  9. Hola Juan, a mi tampoco me gusta el bullicio me agobio mucho por eso te entiendo😉con este cierre de la ç de alcachofa das el broche de oro 👌pues la receta me parece deliciosa, un buen plato para fin de fallas 😋 que tengas buena semana

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  10. Buenos días, Juan: por mi no te cortes, puedes seguir trayendo recetas con alcachofas hasta el día del Juicio, jajaja. No me canso de ellas.
    Precioso cuadro el que traes, pero me llama más la receta, me parece muy creativo el aunar las alcachofas con la morcilla y el parmentier. Especialmente, lo de la morcilla, de lo más original. Tiene que estar buenísimo. Te ha quedado un plato de diez. Ya imagino lo que lo habrás disfrutado. Un abrazo.

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  11. Donde haya alcachofas yo... ME APUNTO! esta combinación de parmentier, morcilla y alcachofas tiene que estar divina!

    PTNTS
    Glòria

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  12. Me gusto la pintura y es una forma diferente de comer alcachofas. Te mando un beso y gracias por la receta.

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  13. ¡Hola Juan! ¿Qué tal los días de libertad, sin grandes responsabilidades? Me imagino que muy bien, con ganas de continuar y seguir disfrutando.
    La receta magnífica, llena de sabor y fácil de preparar. Se la he comentado a marido porque como tu, es un entusiasta de la alcachofa, siempre está dispuesto a comerla, no se cansa. Bueno Juan, seguro que ya has cogido ritmo y ejerces de abuelo.
    Feliz tarde.😘

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  14. Juan, nada como una buena tranquilidad cuando uno es lo que realmente le apetece... Y nada como una estupenda propuesta como esta que nos traes, de nuevo con alcachofas, con una combinación muy rica y original. Yo soy muy aficionado al parmentier y con alcachofas y morcilla debe quedar de miedo

    Abrazos!

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  15. Hola Juan!!
    A ti te pasa igual que a mí cuando aquí llega la temporada del ruibarbo, que cada semana publico algo con esta fruta-verdura.

    El plato de hoy lo encuentro muy fino y elegante para el paladar.

    Yo a igual que tú también me escaparía, odio los petardos jaja

    Un abrazo ♥

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  16. Juan una forma mas de comer la alcachofa siempre me sorprendes , tiene que estar riquisima abrazos

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  17. Tu plato se ve muy rico y muy completo, no he tenido muchas oportunidades de comer morcilla, pero me ha gustado la combinacion con el parmentier. Que bonito cuadro nos presentas, me gusta el detalle de las alcachofas al lado de las flores.
    Un abrazo

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  18. Hola Juan, un plato sencillo y buenísimo, a mi encima es que me gustan mucho las alcachofas y también la morcilla de Burgos, así que ya puedes suponer que me lo comería encantada de la vida, cosa que no creo que tarde mucho en suceder jajaja.
    Besos

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Os agradezco vuestro comentario. Siempre es bienvenido.