Lentejas con alcachofas
España es el país europeo donde más se consumen legumbres, siendo los garbanzos la opción más elegida seguida de las alubias y las lentejas.
Existen muchas variedades de lentejas pero las más representativas en la cocina española son la "rubia castellana", "rubia de La Armuña", "pardina" y "verdina".
La variedad que más suelo utilizar es la "pardina", que popularmente se conoce como "francesa" y se diferencia de las demás por ser la de tamaño más pequeño, entre 4 y 5 milímetros. Tiene un color pardo tirando a marrón o rojizo, se caracteriza por su sabor agradable, muy suave al paladar, y por ser la que más espesa en la cocción.Esta legumbre contiene una gran cantidad de proteínas siendo ideal para aquellos que consumen poca carne.
En diferentes entradas con lentejas he dado a conocer unos cuadros de diversos autores, todos ellos relacionados con el pasaje bíblico del cambio de primogenitura entre Esaú e Jacob.
En esta ocasión el cuadro es de un gran pintor español, José de Ribera. A ver si os gustan los dos, el cuadro y la receta.
Isaac y Jacob
José de Ribera. El Españoleto
(Játiva, Valencia, 1591 - Nápoles, 1652)
(Játiva, Valencia, 1591 - Nápoles, 1652)
Ribera es, cronológicamente, el primero de los grandes maestros españoles que surgieron en las décadas centrales del siglo XVII. Los comienzos de su educación artística son todavía objeto de conjetura, pero hay constancia de su presencia en Parma en 1611, cuando tenía veinte años. Cuatro años más tarde se encuentra en Roma, en una colonia de pintores extranjeros y llevando quizá una vida bohemia: se cuenta que abandonó la ciudad para escapar de sus acreedores. Para 1616 estaba en Nápoles, donde se casó con la hija de Bernardino Azzolino, un importante pintor local de reconocido prestigio. El reino de Nápoles estaba entonces bajo el dominio de España, y Ribera vivió en su capital por el resto de su vida. Además de tener importantes clientes de Roma y otras ciudades aparte de Nápoles, el joven pintor fue pronto descubierto por el virrey español, el duque de Osuna. Por mediación del duque y de todos los virreyes siguientes (el duque de Alcalá, el conde de Monterrey y el duque de Medina de las Torres), su obra entró a España, y en particular a la colección real.
En este cuadro saltan especialmente a la vista las grandes dotes de pintor narrativo del artista, así como su facultad de transmitir una amplia gama de emociones humanas complejas. La compresión espacial tiene por efecto aumentar subliminalmente la tensión dramática, conscientes como somos de toda la rabia y decepción que estallarán cuando Isaac y Esaú descubran el engaño de que han sido víctimas. Este cuadro representa el episodio recogido en el Génesis (capítulo 27)
en que Jacob engaña a su padre, Isaac, a fin de obtener la bendición que
le correspondía por derecho a su hermano mayor, Esaú. Con la ayuda de
su madre, Rebeca, Jacob se viste con ropa de Esaú, lleva comida a su
padre y se cubre el brazo con una piel de cordero para imitar el
abundante vello de su hermano. De ese modo induce a Isaac, anciano y
ciego, a confundirle con Esaú.
Esaú, que aparece a lo lejos por una abertura del lado izquierdo de la composición, volviendo tan tranquilo de cazar, nada sospecha del engaño que se está perpetrando. Rebeca empuja a Jacob hacia su padre con la mano derecha, animándole a sacar el máximo provecho de la situación, al tiempo que a nosotros, los espectadores, nos interpela directamente con la mirada, convirtiéndonos en cómplices silenciosos de su elaborada estratagema. Jacob tiende la mano con algún recelo, incómodo en el papel que le ha caído en suerte, mientras Isaac palpa el brazo del joven en toda su extensión, sin saber si está siendo engañado por el tacto y el olfato
Es un óleo sobre lienzo.
Sus medidas son Alto: 110 cm; Ancho: 291,5 cm
Pintado hacia 1637.
Número de catálogo P001118
Sala 009.
Fuente: Museo del Prado
Sus medidas son Alto: 110 cm; Ancho: 291,5 cm
Pintado hacia 1637.
Número de catálogo P001118
Sala 009.
Fuente: Museo del Prado
Esta receta, un tanto original ya que no había imaginado una mezcla de ingredientes tan llamativa, la vi en un programa de tele y dado que incluía dos ingredientes que me encantan, como son las lentejas y las alcachofas y ya que todavía estamos en la temporada de estas últimas no dudé en llevarla a la práctica. He introducido algunos variantes y este ha sido el resultado.
Lentejas con alcachofas
Ingredientes
360 g de lenteja pardina
8 alcachofas
1 cebolla
1 pimiento verde
90 gr de jamón en taquitos
50 ml de vino
2 clavos de olor
6 granos de pimienta negra
1 cucharadita de comino molido
aceite de oliva virgen extra
sal
8 alcachofas
1 cebolla
1 pimiento verde
90 gr de jamón en taquitos
50 ml de vino
2 clavos de olor
6 granos de pimienta negra
1 cucharadita de comino molido
aceite de oliva virgen extra
sal
Elaboración
Pelamos las alcachofas, les quitamos el tallo y las primeras capas de hojas hasta llegar a la parte más clara, cortamos las puntas, repasamos los tallos y las cortamos en cuartos. Las ponemos en una olla rápida con agua con sal y una cucharadita de harina, cerramos la olla y llevamos al fuego. Desde que salen los dos aros mantenemos en cocción a fuego suave 5 minutos. Apartamos del fuego y dejamos despresurizar. Las escurrimos y reservamos.
Calentamos en una cazuela unas 3 cucharadas de aceite. Incorporamos los taquitos de jamón, removemos y añadimos el vino, dejamos reducir y añadimos las lentejas, removemos y cubrimos con agua.
En una malla de cocción ponemos el pimiento entero al que le hemos cortado el tallo y sacado las semillas y la cebolla pelada y con los clavos de olor clavados, la cerramos y la ponemos en la cazuela con las lentejas.
Cuando las lentejas están en su punto, sacamos la bolsa, extraemos el pimiento y la cebolla y una vez troceados los colocamos en el vaso de la batidora junto con los granos de pimienta y el comino molido, añadimos un cucharón del caldo de las lentejas y trituramos. Incorporamos a la cazuela y removemos con suavidad. Reservamos.
En una sartén ponemos un poco de aceite y cocinamos las alcachofas un par de minutos, las sazonamos y servimos en los platos encima de las lentejas.
Calentamos en una cazuela unas 3 cucharadas de aceite. Incorporamos los taquitos de jamón, removemos y añadimos el vino, dejamos reducir y añadimos las lentejas, removemos y cubrimos con agua.
En una malla de cocción ponemos el pimiento entero al que le hemos cortado el tallo y sacado las semillas y la cebolla pelada y con los clavos de olor clavados, la cerramos y la ponemos en la cazuela con las lentejas.
Cuando las lentejas están en su punto, sacamos la bolsa, extraemos el pimiento y la cebolla y una vez troceados los colocamos en el vaso de la batidora junto con los granos de pimienta y el comino molido, añadimos un cucharón del caldo de las lentejas y trituramos. Incorporamos a la cazuela y removemos con suavidad. Reservamos.
En una sartén ponemos un poco de aceite y cocinamos las alcachofas un par de minutos, las sazonamos y servimos en los platos encima de las lentejas.
Confío en que este plato sea de vuestro agrado.
Este próximo sábado 11 de marzo, dan comienzo aquí las fiestas. Nunca son en fechas fijas ya que depende de cuando se celebra la Semana Santa. Así que aprovecho para dejar descansar el blog unos días.
Buenos días, Juan: Ya sabes que coincidimos en la afición por las alcachofas, por lo que estas lentejas no sólo son de mi agrado, sino que estaría encantada de probarlas. No se me ocurre mejor combinación, con su jamoncito y todo. Has hecho un plato de 10 y seguro que las habéis disfrutado muchísimo. Feliz semana y un abrazo.
ResponderEliminarHola Juan has cocinado dos cosas que me gustan muchísimo las lentejas y las alcachofas.
ResponderEliminarY sabes nunca se me ha ocurrido ponerlas en el mismo plato que buena idea y que rico!!
Besos y feliz semana
Por supuesto que me gustan los dos, cuadro y lentejas. Mira que las he preparado con cantidad de ingredientes, y con alcachofas que me encantan, no. Gracias Juan por la idea, las próximas que prepare, las llevarán seguro.
ResponderEliminarUn beso.
Grazie carissimo, lenticchie e carciofi è un abbinamento a cui non avrei mai pensato!
ResponderEliminarHola Juan !
ResponderEliminarDesdeluego que tanto el cuadro como las lentejas son sorprendentes.
Nunca las he cocinado así y tienen que estar de rechupete.
Disfruta de las fiestas y a la vuelta nos cuentas.
Un abrazo.
A mí me encantan las lentejas pardinas, pero nunca las he comido con alcachofas ¡Y mira que me encantan!
ResponderEliminarSe me hace la boca agua cuando recuerdo las que hice un día siguiendo una de tus recetas, estaban deliciosas, tendré que repetirlas, aún hay alcachofas en el mercado, llego a tiempo.
Sigo con mis apuntes y tengo curiosidades para contarte, por ejemplo el significado, en una fotografía del siglo XVI, cuando un rey apoya su mano sobre un mueble o un frailero y también qué se entiende al ver una espada a su lado.
Otra, colecciones, tesoros, ¿significan lo mismo?
Prometo que te lo contaré.
Cariños.
Kasioles
Gracias por la receta te mando un beso.
ResponderEliminarUn cuadro muy representativo para hablar de las lentejas y por supuesto un platazo, una buena y sana combinación de ingredientes con un resultado muy rico.
ResponderEliminarDisfruta de las fiestas!
Besos.
Buenos días Juan, por un momento y dada tu afición por ilustrar tus recetas con una imagen de un cuadro afín a sus ingredientes, me ha venido a la cabeza la expresión "venderse por un plato de lentejas" que como bien sabrás tiene su origen en el pasaje bíblico del Génesis, donde cuenta como Esaú acuciado por el hambre, al borde de la extenuación, vendió a su hermano Jacob la primogenitura de la familia, con tal de apaciguar su desaliento. Una escena muchas veces reflejada en cuadros de pintores ilustres y que sin ser exactamente el que nos muestras, podría encajar igualmente en tu post.
ResponderEliminarDe tu receta, solo cabe decir que rico es poco, con estos ingredientes por sí solos ya sé que disfrutaría muchísimo, cuanto más en un potaje tan sano y equilibrado. Me gusta tu elección, es perfecta para mí y los de mi casa.
Un abrazo y buena semana.
Hola Juan!. Un plato de cuchara buenísimo en mi casa triunfaba enseguida, mi marido las lentejas las tiene idealizadas. No seme a ocurrido poner nunca alcachofas a las lentejas pero viendo todos tus ingredientes le irán muy bien pienso, lo probaré. Yo fan incondicional de las alcachofas, las lentejas ya un poquito menos pero...me como un buen platito y de este ten por seguro que si.
ResponderEliminarQue tengáis buenas fiestas!.
Un abrazo.
¡Hola Juan, qué buena entrada! Este fue un pintor de idas y venidas, ya que el momento en el que le tocó vivir fue un tanto convulso.
ResponderEliminar¡Cómo estamos disfrutando de tu pasión por las alcachofas! Seguro que con este plato de lentejas con alcachofas triunfaste en tu casa. Me parecen riquísimas y muy saludables estas lentejas, 😋😋 y el toque de jamón, genial.
Feliz miércoles. 😘
Buenas noches Juan nos traes dos buenas cosas para deleitarnos, una es el cuadro y otra ese riquísimo plato de lentejas que con las alcachofas tiene que estar de lo más 😋un abrazo
ResponderEliminarHola Juan!!
ResponderEliminarYa veo que cuando viene la temporada de alcachofas las sabes aprovechar muy bien en todo.
Seguro que en estas lentejas quedan de lujo.
Qué te diviertas mucho en las fiestas.
Yo mañana viajo con mi marido a Mallorca, será una semana.
Necesito SOL jajaja
Nos leemos a tu regreso.
Un abrazo ♥
Querido Juan, a mi como me encanta las alcachofas siempre que estamos en temporada las coloco donde puedo. Y siempre que hago lentejas le pongo las alcachofas. Asi que seguro que te habrá gustado la combinación, a mi me encanta. Has elaborado un plato completo y delicioso¡¡¡¡ Besos
ResponderEliminarHola Juan,
ResponderEliminarAl igual que tú, las lentejas que uso siempre en casa son las pardinas, porque como bien dices quedan más espesitas, no tienes la sensación de comer lentejas con agua.
En cuanto a la incorporación de las alcachofas, a priori no se me ocurriría añadirlas a un guiso de lentejas, pero a medida que iba leyendo la receta cada vez me parecía más acertada la idea. Estoy segura de que el resultado ha sido un plato absolutamente delicioso.
Espero que disfrutes de estos días de fiesta.
Un beso enorme.
Juan, cuando digo que eres el rey de las alcachofas es por algo. Hoy nos traes otra receta estupenda, muy original la combinación, jamás se me hubiese ocurrido.
ResponderEliminarEspero que disfrutes las fiestas con la familia, nos vemos a la vuelta
Abrazos y buen fin de semana
Juan, ya sabes que me apunto a tu plato de lentejas ya mismo. No le falta de nada y con lo que me gustan lentejas y alcachofas, me parece un disfrute sano y sencillo.
ResponderEliminarRibera, no has podido elegir mejor.
Gracias y un abrazo.
Nunca las he cocinado juntas, me imagino que debe ser un plato riquísimo.
ResponderEliminarPtnts
Glòria
Las alcachofas me gustan , las lentejas tambien, no hay duda que este plato ha de estar delicioso.
ResponderEliminarUn abrazo.
Te voy a copiar la receta pues leyéndola se me ha hecho la boca agua, nunca se me ha ocurrido hermanar lentejas y alcachofas y como ya sabes que soy súper fan de estas últimas, no tardaré en probar.
ResponderEliminarEspero disfrutes de las Fiestas de la Magdalena, ¿todavía subis a la ermita con la Caña, la cinta verde y creo recordar una rosquilletas engarzada en la punta,? aunque no se si esto último es así o fruto de mi imaginación, hace tantos años..., en cualquier caso espero disfrutes las Fiestas, ya nos contarás. Un abrazo grande
Pasaba a desearte un buen fin de semana. Espero que estes mejor.
ResponderEliminarBuenos días Juan, espero que estés pasando unas buenas fiestas, aprovechando que este año nos hace un tiempo buenísimo, yo las estoy disfrutando bastante, sobre todo en las mascletás que me encantan.
ResponderEliminarDe tus lentejas me ha sorprendido lo de los clavos, yo no suelo ponerlos pero lo probaré. Por lo demás tienen que estar de categoría y con las alcachofas aún más.
Un bst.