Flan de chocolate

Si hay una cosa que me gusta en gran medida son los postres y entre ellos me decanto sin dudar por el flan y casi siempre acompañado con nata.

Este fin de semana, último del mes de mayo y preludio del inicio del verano, he preparado este flan teniendo como base uno que siempre me ha encantado, el flan chino, quizá porque era el que siempre tomé y puede que por ello me haya dejado huella.

Esto es lo que utilicé

Ingredientes

1/2 litro de leche
400 ml de nata
(200 ml. para la preparación y 200 ml. para montar)
1 sobre de flan chino
2 hojas de gelatina neutra
1/2 sobre de cuajada
3 cucharadas soperas de cacao
3 cucharadas soperas de azúcar
caramelo para los moldes

Preparación

Caramelizamos los moldes y reservamos.

Ponemos a hidratar las hojas de gelatina.

Disolvemos el contenido del sobre de flan en un poco de leche con el azúcar.

Disolvemos la cuajada en un poco de leche.

Ponemos a calentar el resto de la leche con la nata en un cazo, Cuando empieza a calentar, se añade el flan disuelto y el cacao.

Se mueve continuamente, y cuando empieza a hervir, se aparta del fuego se añade la cuajada disuelta y se lleva a ebullición.

Se aparta y le agregamos la gelatina escurrida. Removemos hasta que se disuelva y vertemos en los moldes. Con las cantidades que he puesto llené dos moldes desechables y uno grande.

Dejamos enfriar y metemos al frigorífico. A uno no le puse nata.

Un postre dulce para despedir el mes. Si os gusta podéis probarlo.

Croquetas de rape

Cuando hago rape le pido al pescadero que una vez lo limpie me ponga los recortes porque con ellos hago el caldo que luego utilizo para la salsa. Una vez hecho y colado, aprovecho los recortes sacando la carne que no es poca, los congelo y luego me sirven para hacer una sopa o, como en este caso, para unas ricas croquetas. Aprovechamiento total.

Más simple y sencillo no puede ser. No pongo cantidades, con lo que extraje tuve para estas 8 croquetas que nos vinieron muy bien como cena ya que las acompañé con una ensalada.

Sin más entro en los detalles.

Ingredientes

Carne de recortes de rape
1 huevo
cebolla, como no había mucho solo puse 1/4 de una mediana
harina
leche la que admita
nuez moscada
pimienta blanca molida
pan rallado
aceite
sal

Forma de hacerlas

Ponemos un poco de aceite en una sartén, cuando calienta, pochamos la cebolla picada y cuando transparenta agregamos la carne del rape desmenuzada y rehogamos. Echamos la harina y cocinamos para que pierda el sabor, vamos añadiendo leche poco a poco y removemos continuamente para que se vaya integrando. A medida que lo necesita agregamos leche hasta que vemos que ya la harina ha quedado totalmente integrada y no se forman grumos.
Incorporamos la nuez moscada, la pimienta molida, sazonamos y cocemos a fuego lento removiendo constantemente hasta que se despega de las paredes de la sartén.
Sacamos, ponemos en un plato y cubrimos con papel film para evitar que la superficie forme costra. Dejamos enfriar y metemos en la nevera hasta que vayamos a utilizarla.

Llegado el momento, batimos el huevo; con una cuchara vamos cogiendo porciones de la masa y formamos las croquetas, las pasamos por harina, luego por el huevo batido y por último por el pan rallado.

Ponemos aceite en una sartén a calentar. Echamos las croquetas, no todas al mismo tiempo para evitar que baje la temperatura del aceite, yo las hice en dos tandas, las freímos hasta que doren, las sacamos y las colocamos sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite. No queda más que ponerlas a la mesa y acompañar con lo que prefiráis.

una muestra

Ya habéis visto que no presentan ninguna complicación. Confío en que hayan sido de vuestro agrado.

Rape en salsa al perejil

Rape, quizá uno de los pescados más feos que puedan existir pero con una carne prieta y de sabor exquisito. Es uno de los que más preparo y que más nos gusta. En esta ocasión está hecho con una salsa al perejil, sencilla pero muy rica.

Ingredientes

1 cola de rape en rodajas
1 cebolla mediana
1 rodaja de pan
2 dientes de ajo
1 copa de vino blanco
Caldo de pescado hecho con los recortes del rape
Laurel
Aceite
Perejil
Sal
Pimienta

Preparación

En una sartén con un poco de aceite marcamos las rodajas de rape salpimentadas. Sacamos y colocamos en una cazuela.
En ese mismo aceite doramos una rodaja de pan. Escurrimos y reservamos.
En un mortero majamos un diente de ajo, el pan frito, perejil picado, sal y un poco de vino.
Picamos muy fino el otro diente de ajo y la cebolla y pochamos en el aceite de freír la rebanada de pan. Cuando transparenta agregamos el resto del vino y dejamos reducir.
Se vuelca en la sartén el majado del mortero, agregamos un poco de caldo, la hoja de laurel y cocemos unos minutos para integrar sabores. Vertemos en la cazuela sobre el rape, rectificamos de sal y cocemos a fuego suave unos 15 minutos. Si espesa mucho la salsa añadimos un poco de caldo.

Espero os guste.

Champiñones al ajillo

Reconozco que este plato no tiene dificultad alguna, no es tampoco de alta cocina ni requiere un gran esfuerzo en su elaboración pero como aperitivo creo que merece la pena prepararlo. Además con el poco tiempo que necesita para hacerse se puede aprovechar la mañana para tomar el sol en la playa, quien tenga, darse un baño y, si no es posible, damos un paseo, hacemos la compra y una vez en casa con tranquilidad los preparamos, nos abrimos una cerveza bien fresquita o nos ponemos una copa de vino y mientras decidimos que vamos a hacer de comida, damos buena cuenta de ellos.

Debemos disponer de

1 bandeja de champiñones laminados, yo una de 250 gr
1 ó 2 dientes de ajo, depende de su tamaño
100 ml de vino
pimienta de cayena
aceite
sal

Vamos al tajo

Sacamos los champiñones de la bandeja, los ponemos en un bol con agua, los limpiamos por si llevan algo de tierra, escurrimos y reservamos.
Arrimamos al fuego una sartén con aceite, mientras calienta, limpiamos los ajos y los picamos. Los echamos en la sartén junto con la pimienta de cayena, cuando doran incorporamos los champiñones, salamos, removemos y dejamos hacer hasta que suelten todo el agua. Agregamos el vino y mantenemos la cocción a fuego medio hasta que reduzca.
Solo queda poner en el plato, abrir la cerveza, echar la copa de vino, sacar la barra de pan y disfrutar en la cocina.

Buen fin de semana.

Huevos rellenos

Antes de que entre el calor, que parece que ya va en serio, y lo digo por la mayonesa porque siempre la hago casera, salvo en el verano. El sabor es totalmente distinto, pero debemos tener la precaución de consumirla pronto, la que no se usa no se debe guardar, así evitaremos problemas.

Hoy me apetecía preparar un plato frío y que mejor que estos sencillos huevos rellenos de atún.

Ingredientes

4 huevos
1 lata de atún en aceite

Para la mayonesa

1 huevo
150 ml de aceite
una rodaja de limón exprimida
sal

Preparación

En un cazo ponemos a calentar agua con una pizca de sal y un chorreón de vinagre. Incorporamos los huevos y desde que comienza a hervir tenemos 10 minutos. Escurrimos y los dejamos en agua fría hasta que vayamos a prepararlos.

Hacemos mientras la mayonesa poniendo en el vaso de la batidora un huevo, sal y el zumo de limón, metemos el brazo de la batidora, echamos aceite y sin despegarlo del fondo batimos hasta que vemos que comienza a espesar, levantamos y agregamos aceite poco a poco hasta obtener la textura deseada. Reservamos en el frigorífico.

Pelamos los huevos duros, los partimos por la mitad y extraemos las yemas. Las ponemos en un plato junto con el contenido de la lata de atún bien escurrido. Chafamos, mezclamos las yemas con el atún y agregamos mayonesa hasta obtener una crema ligera. Con ella rellenamos los medios huevos y acabamos cubriendo con mayonesa. Servimos el resto en el plato.

Un plato rápido y que nos gusta mucho. Espero que os guste también.

Arroz con puerro y calabacín

Hoy pongo una sencilla y fácil receta. La vi en un programa de tele, tomé nota y como siempre que hago algo, la suelo adaptar a mis gustos. Es un plato ligero que para el tiempo en el que nos encontramos es ideal.

Ingredientes

4 tacitas de arroz, 2 calabacines pequeños, 1 puerro, 1 diente de ajo, 2 cebolletas, 2 tomates maduros, 9 tacitas de caldo, aceite y sal.

Para el caldo, la parte verde del puerro, 1 cebolla, un manojo de perejil y una pastilla de caldo de carne.

Preparación

Ponemos agua a calentar en un cazo y preparamos un caldo con la parte verde del puerro, la cebolla, perejil y la pastilla de caldo de carne. Reservamos.

Mientras se hace el caldo, troceamos, el puerro, el ajo, las cebolletas y los tomates, y los sofreímos en una cazuela con un fondo de aceite. Una vez lo tenemos sofrito, añadimos el arroz, removemos y lo cocinamos unos minutos. Cubrimos con el caldo que tenemos ya calentado y dejamos cocer a fuego suave unos 20 minutos.

Mientras cuece el arroz cortamos en trozos los calabacines sin pelar, y a mitad de cocción los incorporamos a la cazuela, comprobamos el punto de sal, dejamos que el arroz tome su punto y apartamos. Solo resta ponerlo a la mesa y disfrutarlo.

Sencillo, fácil y rápido de hacer. Confío en que sea de vuestro agrado.

Alcachofas cazadora

La temporada de la alcachofa está a punto de finalizar. Hoy pongo esta receta, que me dieron cuando estuvimos en la Feria de la Alcachofa, en Benicarló, y que he adaptado a mis gustos. Es la última en este año, con gran sentimiento, ya que es una de las hortalizas que más me gusta y que no me canso de comer. Pero todo tiene un fin y para la alcachofa ha llegado ya. Cada vez se van viendo menos y aunque soy consciente de que no a todos gustan, quiero rendirle un homenaje porque me ha acompañado en muchas comidas, porque me ha dado su exquisito sabor y porque su ausencia voy a notarla mucho. La alcachofa ha muerto ¡viva la alcachofa!

Un homenaje sencillo, humilde, nada espectacular, con poca cosa se conforma y ya veis como no pide mucho para todo lo que da.

Ingredientes

8 alcachofas
5 dientes de ajo
100 ml de vino blanco
1 bote mediano de tomate natural troceado
1 limón
1 pastilla de caldo
caldo de cocción
1 cucharadita de azúcar
aceite
orégano
pimienta
sal

Preparación

Como siempre cuando las hacemos, lo primero es quitar las hojas externas más duras, llegamos hasta las que tienen un color tirando a blanquecino, cortamos las puntas, repasamos la base y las partimos en cuatro trozos. Las ponemos en un bol que tenemos con agua y el zumo de medio limón.
Con las hojas que hemos quitado y los troncos, todo bien lavado y limpiado, preparamos un caldo cociéndolas en agua con un poco de sal y la pastilla de caldo durante unos 10 minutos. Colamos y reservamos.

Una vez hecha esta operación, pelamos lo ajos y los troceamos. Ponemos una cazuela con un fondo de aceite a calentar, echamos los ajos y cuando empiezan a dorar agregamos las alcachofas, las rehogamos, echamos el vino y dejamos reducir. Cuando el vino ha reducido incorporamos el tomate troceado con su líquido de conserva previamente colado y una punta de azúcar para eliminar la posible acidez. Rehogamos a fuego suave hasta que el tomate reduzca y le añadimos un vaso del caldo reservado. Salpimentamos y cuando la salsa espesa espolvoreamos con orégano y dejamos reposar.

Receta sencilla y rica. Os ofrezco un asiento a la mesa para degustarlas, si os apetecen.

Bizcocho de chocolate

Uno está esperando que llegue el fin de semana para, por lo menos, romper la rutina diaria, salir a dar un paseo y si es posible tomar algo de sol, pero parece ser que llegados esos días es cuando el tiempo empeora, al menos por esta zona y eso que hemos tenido la suerte de que el sábado hiciera un buen día porque durante el viernes no dejó de llover y el domingo el sol ha brillado por su ausencia aunque a última hora ha mejorado.

Y como no hay mal que por bien no venga, he aprovechado esta circunstancia para meterme en la cocina y preparar un bizcocho que hacía tiempo tenía ganas de probar.

Es un bizcocho sencillo de hacer y con muy buen resultado. Vamos a por él.

Ingredientes

3 huevos
180 gr de harina
80 gr de cacao en polvo
100 gr mantequilla
90 gr de azúcar
2 cucharadas soperas de azúcar moreno
50 ml de leche
1/2 sobre de levadura
ralladura de una naranja

Preparación

Precalentamos el horno a 180º
Engrasamos un molde con mantequilla, espolvoreamos con harina y reservamos.
Lavamos la naranja y la rallamos.
Fundimos la mantequilla, la ponemos en un bol, añadimos el azúcar y batimos hasta conseguir una masa. Incorporamos los huevos de uno en uno. No añadimos el siguiente hasta que el anterior no se haya mezclado totalmente.
Una vez todo bien integrado, incorporamos el cacao, la leche y la ralladura de naranja. Mezclamos.
Unimos la harina con la levadura, tamizamos y la agregamos. Mezclamos bien y vertemos en el molde e introducimos al horno 35 minutos. A los 30 minutos comprobamos si está hecho introduciendo un palo de brocheta y si sale seco, apagamos el horno y sacamos. Dejamos enfriar y desmoldamos.

Os invito a un trozo.

Lentejas guisadas

Cuando parecía que el buen tiempo iba a entrar, lo que ha entrado ha sido el frío y la lluvia, al menos por esta zona. Bien es cierto que la temperatura no ha sido muy baja pero de haber disfrutado, la semana pasada de unos días a 28º, hemos pasado a los 11º. A partir del viernes por la noche comenzó la lluvia y, durante todo el fin de semana no ha parado de llover hasta el martes, de momento ha dejado de hacerlo pero nos acompaña el viento aunque no muy fuerte.
Ayer miércoles aunque salió el sol lo hizo con más nubes que claros.
Ya lo dice un refrán, "hasta el cuarenta de mayo, no te quites el sayo", mucha razón lleva.

Aprovechando esta circunstancia he preparado unas ricas lentejas. Legumbre que nos gusta mucho y que suelo hacer con bastante asiduidad.

Ingredientes

350 gr. de lentejas pardinas o de las que tengáis
dos puñados de arroz
1 chorizo de guisar
1 puerro
1 pimiento verde italiano
1 zanahoria
4 dientes de ajo
1 cucharada de postre de pimentón dulce
1 hoja de laurel
agua
sal

Preparación

Si las lentejas no son pardinas habrá que dejarlas la noche anterior a remojo.

Ponemos las lentejas en una cazuela con la hoja de laurel, las cubrimos con agua y añadimos los dientes de ajo pelados y enteros, el chorizo partido a rodajas y el pimentón. Mientras el agua calienta, limpiamos el puerro y el pimiento, los partimos por la mitad y los agregamos a las lentejas junto con la zanahoria entera y pelada. Sazonamos y cocinamos a fuego medio unos 20 minutos. Si hace falta añadimos un poco de agua. Sacamos la hoja de laurel, retiramos las verduras y las trituramos en la batidora con un poco de caldo de cocción, las incorporamos a la cazuela, rectificamos de sal, añadimos el arroz y dejamos que se haga todo a fuego muy suave. Removemos de vez en cuando para que no se agarre, comprobamos el punto de cocción y dejamos reposar.

De esta forma a quien no le guste la verdura no tendrá motivos para quejarse.
Probadlas y comprobareis lo ricas que están.

Pannacotta de fresa

Para celebrar este fin de semana y aprovechando que estamos en la temporada de la fresa he preparado un postre que me gusta mucho, una panna cotta.

Hace unos días me regalaron unos moldes de silicona pequeños, y dado que no los había utilizado pensé que sería una buena ocasión para hacerlo. No sé si tenía que haberle puesto algo antes o si en lugar de echar primero la gelatina de fresa debí poner la panna cotta, el caso es que al intentar desmoldarlo me costó un poco y al final no salió integro ya que se quedaron algunas partes en el molde. Sin embargo en el molde circular no ocurrió nada y se despegó sin problemas, por tanto creo que el problema residió en poner la gelatina de fresa primero en lugar de la panna cotta.

La hice en dos moldes, en uno, con forma de oso, la puse con gelatina de fresas y en el otro, circular, solo la crema. No existe pues diferencia en la composición. Reconozco que el acabado deja bastante que desear pero el resultado fue una delicia.

Ingredientes para la crema:

200 ml de nata para montar
200 ml de leche
2 sobres de azúcar vainillado
2 cucharadas soperas de azúcar
4 hojas de gelatina
5 fresas

Ingredientes para la gelatina de fresa:

1/4 kg de fresas
3 cucharadas soperas de azúcar
5 hojas de gelatina.

Preparación:

Gelatina de fresas,

Limpiaremos las fresas, quitamos la parte verde que pueda llevar, las troceamos, las ponemos en el vaso de la batidora junto con el azúcar y trituramos. Colamos y ponemos en un cazo a calentar. Cuando espesa apartamos y le agregamos la gelatina hidratada y escurrida. Removemos para que se disuelva y dejamos enfriar. Una vez fría volcamos en el molde.

Pannacotta

Hidratamos las hojas de gelatina poniéndolas en agua.
En el vaso de la batidora ponemos las fresas troceadas, la leche y el azúcar. Trituramos hasta conseguir una mezcla homogénea, colamos y reservamos.
Ponemos a calentar en un cazo la nata y el azúcar vainillado, removemos para que el azúcar no se pegue y antes de que comience a hervir apartamos del fuego y le incorporamos el batido de leche y fresas, removemos y ponemos al fuego. Retiramos antes de que hierva le añadimos las hojas de gelatina escurridas y removemos hasta que se disuelvan. Dejamos enfriar y volcamos en el molde sobre la gelatina de fresas o en otro molde y metemos en el frigorífico.

En molde circular pequeño y sin gelatina con fresas para acompañar

Creo que el fallo que cometí fue poner primero la gelatina en lugar de la crema, de ahí que no se desmoldara bien. Espero vuestras sugerencias. Siempre son bien recibidas.