La quinoa es una planta andina que se originó en los alrededores del lago Titicaca. Antes de su domesticación, la quinoa silvestre probablemente se usó por sus hojas y semillas para la alimentación. La evidencia histórica disponible señala que su domesticación por los pueblos de América pudo haber ocurrido entre los años 3.000 y 5.000 (a. C.).
El primer español que escribe sobre el cultivo de quinoa fue Pedro de Valdivia. En un informe remitido a Carlos V, le mencionó que, al observar los cultivos alrededor de Concepción, Chile, entre otras plantas — maíz y patatas—, los indios sembraban también la quinoa para su alimentación.
Suelo hacer con bastante frecuencia albóndigas tanto de carne, mixtas de magro y ternera, como de pollo, aunque son estas las que más preparo ya que, por el tipo de carne, son las que tienen más aceptación.
Estas albóndigas que os propongo están hechas de igual forma que estas albóndigas de pollo en salsa, así que repito de nuevo tanto los ingredientes como su elaboración. Lo que varía es el acompañamiento de la quinoa, ingrediente que comencé a utilizar hace poco más de un año. Espero que sea de vuestro agrado.
Nido de quinoa con albóndigas de pollo en salsa
Ingredientes
500 gr de pechuga de pollo picada
100 gr de miga de pan del día anterior
50 ml de leche
1 diente de ajo
1 huevo
perejil
pimienta blanca molida
100 gr de miga de pan del día anterior
50 ml de leche
1 diente de ajo
1 huevo
perejil
pimienta blanca molida
100 gr de quinoa
1 diente de ajo
2 clavos de olor
caldo de verduras
Salsa
1 cebolla
1 puerro (la parte blanca)
1 zanahoria
1 cucharada sopera rasa de harina
50 ml de vino blanco
1 pastilla de caldo de pollo
1/2 cucharadita de ras el hanout
1/2 cucharadita de cúrcuma
1 hoja de laurel
aceite de oliva virgen extra
sal
1 diente de ajo
2 clavos de olor
caldo de verduras
Salsa
1 cebolla
1 puerro (la parte blanca)
1 zanahoria
1 cucharada sopera rasa de harina
50 ml de vino blanco
1 pastilla de caldo de pollo
1/2 cucharadita de ras el hanout
1/2 cucharadita de cúrcuma
1 hoja de laurel
aceite de oliva virgen extra
sal
Elaboración
Pedimos en la carnicería que nos piquen la pechuga.
Pelamos el diente de ajo y lo majamos en un mortero con un poco de perejil picado.
En un bol ponemos la carne de pollo, un poco de sal, la miga remojada en leche y el majado de ajo y perejil. Mezclamos bien y añadimos el huevo. Mezclamos bien todo, salpimentamos y formamos las albóndigas. Calentamos aceite en una sartén y freímos las albóndigas.
Sacamos y reservamos en un plato.
Pelamos y picamos la cebolleta y la parte blanca del puerro y pochamos en la sartén donde hemos frito las albóndigas. Cuando transparenta añadimos la zanahoria pelada y cortada en medias lunas. Sazonamos y cuando la zanahoria esté hecha añadimos la harina, la rehogamos y agregamos el vino y la pastilla de caldo diluida en un vaso de agua que previamente hemos puesto en el microondas a calentar y cocinamos a fuego suave unos 10/12 minutos. Volcamos en el vaso de la batidora, trituramos y echamos de nuevo en la sartén, añadimos la hoja de laurel, el ras el hanout y la cúrcuma, damos calor y cuando comienza a hervir agregamos las albóndigas. Bajamos a fuego suave y cocinamos 15 minutos o hasta que la salsa tome cuerpo. Si espesa mucho añadimos un poco de agua.
Pelamos el diente de ajo y lo majamos en un mortero con un poco de perejil picado.
En un bol ponemos la carne de pollo, un poco de sal, la miga remojada en leche y el majado de ajo y perejil. Mezclamos bien y añadimos el huevo. Mezclamos bien todo, salpimentamos y formamos las albóndigas. Calentamos aceite en una sartén y freímos las albóndigas.
Sacamos y reservamos en un plato.
Pelamos y picamos la cebolleta y la parte blanca del puerro y pochamos en la sartén donde hemos frito las albóndigas. Cuando transparenta añadimos la zanahoria pelada y cortada en medias lunas. Sazonamos y cuando la zanahoria esté hecha añadimos la harina, la rehogamos y agregamos el vino y la pastilla de caldo diluida en un vaso de agua que previamente hemos puesto en el microondas a calentar y cocinamos a fuego suave unos 10/12 minutos. Volcamos en el vaso de la batidora, trituramos y echamos de nuevo en la sartén, añadimos la hoja de laurel, el ras el hanout y la cúrcuma, damos calor y cuando comienza a hervir agregamos las albóndigas. Bajamos a fuego suave y cocinamos 15 minutos o hasta que la salsa tome cuerpo. Si espesa mucho añadimos un poco de agua.
Mientras se hacen las albóndigas ponemos hervir en un cazo el caldo de verduras (1 y 1/2 veces) la medida de la quinoa, con el diente de ajo y los clavos de olor.
Incorporamos la quinoa, previamente lavada, y mantenemos la cocción unos 15 minutos o el tiempo que indique el fabricante. Dejamos consumir el caldo y dejamos reposar unos minutos.
La volcamos y la extendemos en un recipiente para que enfríe.
Incorporamos la quinoa, previamente lavada, y mantenemos la cocción unos 15 minutos o el tiempo que indique el fabricante. Dejamos consumir el caldo y dejamos reposar unos minutos.
La volcamos y la extendemos en un recipiente para que enfríe.
Retiramos el diente de ajo y los clavos de olor.
En un plato ponemos una base de la salsa de las albóndigas y con ayuda de un aro de emplatar formamos la parte exterior del nido con la quinoa y colocamos albóndigas en su interior.
Una receta que apenas tiene complicación y que confío sea de vuestro agrado.
Que bien presentado está hoy tu plato, digno de una mesa de celebración. Yo soy una habitual de las albóndigas también con todo tipo de alimentos y suelo acompañarlas con distintas salsas. Pero hoy tú has puesto quinoa con ellas y me parece de lo más acertado. También la consumo, pero no preparo mucha variedad de recetas, hoy me has dado una buena idea que seguro pondré en práctica.
ResponderEliminarUn beso
Que bonito queda en el plato Juan.
ResponderEliminarFíjate que albóndigas preparo en casa de diferentes carnes y también de pollo que están riquísimas, pero con la quinoa, no se porque, pero aun no la he introducido en mi dieta, será cuestión de ponerlo en practica,
Un beso
Qué presentación tan bonita te ha quedado, las albóndigas se ven jugosas y con las especias que has puesto también muy ricas.
ResponderEliminarBesos.
Pero Juan!!
ResponderEliminarqué te van a otorgar la estrella Michelín!!
Qué presentación y qué receta más rica!!
Yo la quinoa la desconozco en mi cocina.
La tendré que probar algún día ;)
Un abrazo ♥
Hola, Juan: Muy interesante tu receta y me atrae lo de utilizar ras el hanout en la salsa. Sin embargo, la quinoa no me atrae mucho. Será que la he probado poco :-DDD
ResponderEliminarUn abrazo.
Juan mon ami, je suis très contente d'avoir de tes nouvelles.
ResponderEliminarUne recette pleine de saveurs et une présentation des plus originales.Bravo.
¡¡Hola Juan!! Vaya, vaya, qué receta más rica y qué emplatado más original. No se me hubiera ocurrido nunca una presentación tan distinta y estupenda a la vez. Todo me gusta, las ricas albóndigas de pollo, la salsita con verduras y saborcito exótico y la quinoa también aromatizado con los clavos de olor y el ajo. Muy interesante, nos has sorprendido a todos y para bien. Besitos.
ResponderEliminarHola Juan, pero que plato más bueno y bien presentado, me encanta todo!! Las albóndigas con esa salsa y acompañadas de la quinoa, estarán exquisitas!!
ResponderEliminarEspero que tu también estés bien y hayas pasado un buen verano, a ver si algún día nos vemos.....
Un abrazo.
Hola Juan !
ResponderEliminarSolo con ver la fotografía y esa presentación se van los ojos .
Me encantan los ingredientes aunque he de reconocer que la quinoa pocas veces la consumimos.
Un abrazo.
Hola Juan, yo soy una gran fan e la albóndigas, las de pollo son deliciosas y muy suaves.
ResponderEliminarYa me apunto tu receta con quinoa para probarla.
Un abrazo.
¡Vamos, Juan! Nos dejas admiradas con tu plato de hoy, para que luego digas que solo eres un cocinero por afición, y digo yo yo, que de aficionado nada, porque tu presentación de hoy, además de esas albóndigas de pollo con esa salsita tan rica, es obra de un cocinero más que avanzado.
ResponderEliminarBesos
Hola Juan, una presentación de 10 para una receta de 12, hace mucho que no cocino quinoa y me han entrado unas ganas tremendas cuando he visto tus albondigas, me encantan.
ResponderEliminarBesos
Que bonitas quedan así presentadas las albóndigas.
ResponderEliminarMe encanta hacerlas de pollo y más o menos las hago como tu, pero en lugar de clavos de olor pongo canela y no pongo cúrcuma nis ras el hanout. Probaré con tus especias
Ptnts
Glòria
Holaa Juan, qué bien te ha quedado! No he probado nunca la quinoa, tengo mucho que aprender todavía y eso me encanta!. Hacía mucho que no me pasaba por tu cocina y es que tengo una vida muy agitada últimamente. Un abrazo enorme y a disfrutar.
ResponderEliminarLa mejor manera de comer Quinoa es la que nos presentas.Maravilloso muchacho Mil gracias
ResponderEliminarJuan, en casa la quinoa va por rachas, ahora hace tiempo que no la comemos, y eso que tenemos un paquete en la despensa. Nunca se me hubiese ocurrido combinarla con albóndigas, suena estupendamente. Además, presentadas de esta forma tan original apetece aún más cuando tienes el plato por delante
ResponderEliminarAbrazos!
Juan en casa la quinoa no ha tenido mucha aceptación. Los ingredientes que de repente se ponen muy de moda no suelen ser santo de mi devoción y me tomo mi tiempo (un gran tiempo) antes de probarlos. La quinoa llegó en la caja de degustación a la que estoy suscrita y al final me la acabé comiendo yo.
ResponderEliminarA Elena se la ponen algunos días en la guardería y no se la come tampoco, y eso que es de buen diente.
Lo mismo que te cuento esto te digo que si pillo ese plato de albóndigas lo dejo limpio porque la pinta es espectacular. Entiendo que en casa tenga más aceptación el pollo porque a mí me ocurre igual.
¡Besos mil!
Hola Juan , te ha quedado un plato estupendo y una presentación muy original ,las albondigas me gustan y las preparo a menudo ,con cualquier tipo de carne y salsa ,pero la quinoa no es algo que me guste ,aunque en tu plato queda espectacular
ResponderEliminarun abrazo
Una interesante manera de presentar la quinoa, seguro que combinándola con las albóndigas está increíble, me gusta mucho tu plato
ResponderEliminarUn beso
Hola Juan!. No puedo pasar de largo sin al menos darte los buenos días. Decirte también que soy incapaz de decir que bueno tu plato si no me lo comería je, je, me ocurre en todos los blogs, plato de carne..... ya sabes, es que no soy capaz a no ser que piense que para mi familia perfecto y este por la quínoa mi marido va a ser que no. Lo de publicarlo o no, tu mismo.
ResponderEliminarEspero sigas bien.
Un abrazo.
Acabo de leer tu comentario y primero quiero aclararte algo.
ResponderEliminarEn la receta que he subido a mi blog, es la primera vez que pruebo el pavo.
Siempre he tenido en mente que la carne de pavo era insípida y seca, actualmente se está promocionando mucho su carne por las pocas calorías que tiene y por su precio asequible.
Uno de los días que he ido a la carnicería, me lo ofreció la chica que me suele despachar y lo cierto es que me ha sorprendido su sabor, me había dicho que los contra muslos eran sabrosos y no me engañó, con la salsita que les he hecho no están nada mal, pero lo cierto es que es cuestión de gustos.
Y en cuanto a tu plato de hoy... ese sí que no tiene ninguna duda en cuanto a su sabor, tiene que estar buenísimo y la combinación es perfecta, incluso como plato único, yo estaría encantada con él.
Cariños.
Kasioles
Hola Juan, tu plato es de fiesta, por sus ingredientes y por la presentación. La combinación me encanta, diferente y sobre todo saludable. Mil besos!!!
ResponderEliminarHola Juan¡¡¡ siempre es grato leer tus introducciones, aprendo un montón. La cultura culinaria y gastronómica me encanta y contigo siempre descubro cosas interesantes. Como esta combinación tan rica que nos has hecho de albóndigas y quinoa. Es una forma perfecta de aprovechar la salsa tan rica de las albóndigas. Buena idea¡¡¡ Besos.
ResponderEliminarHola Juan
ResponderEliminarYo la quinoa de momento no la he introducido en la dieta, pero no descarto hacerlo en un futuro, y si es con una receta como la que nos presentas hoy, estoy segurísima de que en casa nos iba a encantar, porque esas albóndigas de pollo con la cúrcuma y el ras el hanout que le añadiste, junto a los demás ingredientes, son dignas de un banquete de fiesta.
De este plato me gusta todo, incluso me encanta la presentación, te ha quedado un plato de 10 puntos en todos los aspectos.
Un beso, Juan