Ya hemos entrado en la Cuaresma, atrás quedó el Carnaval y a partir de ahora veremos recetas un tanto acordes a este tiempo. Cierto es que, dado los tiempos que corren, el cumplir una serie de normas parezca que sea de otros tiempos ya muy lejanos y que si se llevan a cabo parece como si uno quisiera ir contracorriente aunque considero que cada cual debe hacer lo que considere oportuno sin vejar ni señalar a quienes discrepan de su opinión y la verdad es que eso no sucede a menudo. La libertad de uno termina donde comienza la del otro. Pongámosla en práctica y todo irá mejor.
Si hay algo que es consustancial a estas días de Cuaresma son las torrijas. Torrijas, postre sencillo, de aprovechamiento y que por otra parte hace las delicias de quienes las comen. Las torrijas han tenido infinidad de variantes, las de siempre, bañadas en leche con canela y rebozadas en huevo, hasta las que llevan licores, cremas o cualquier otro añadido, como el chocolate o café.
Yo he hecho varias, al chocolate, anisadas, variadas, en almíbar de azahar y unas que me encantaron, con a la nata con crema inglesa.
Hoy os ofrezco otra variante, torrijas al café, ya que he introducido un ingrediente a la leche como es el café, aunque el que haya utilizado sea descafeinado por aquello de si las comen los peques. A ver que os parecen.
Como considero que esta receta es de aprovechamiento me permito agregarla en el blog que Marisa, de Thermofan, ha creado para estas publicaciones y que no es otro que 1+-100 desperdicio 0.
Confío en que pueda ser incluida.
Torrijas al café
Ingredientes
1 barra de pan del día anterior
400 ml de leche
1 sobre de café soluble descafeinado
2 cucharadas colmadas de azúcar
1 rama de canela
1 cucharadita de agua de azahar
2 huevos
una pizca de sal
aceite de oliva virgen extra
1 corteza de limón
mezcla de azúcar y canela molida al gusto
400 ml de leche
1 sobre de café soluble descafeinado
2 cucharadas colmadas de azúcar
1 rama de canela
1 cucharadita de agua de azahar
2 huevos
una pizca de sal
aceite de oliva virgen extra
1 corteza de limón
mezcla de azúcar y canela molida al gusto
Como las vamos a hacer
Cortamos la barra de pan en rodajas de unos 2-3 cm, de grosor.
En un cazo calentamos la leche con el café soluble y añadimos el azúcar, la rama de canela y el agua de azahar. Cocemos a fuego suave removiendo hasta que el azúcar se disuelva.
Dejamos entibiar para infusionar sabores.
Colocamos las rebanadas de pan en una fuente y cubrimos con la mezcla de café. Dejamos reposar hasta que empapen todo el líquido, unos 15/20 minutos.
Mientras empapan, batimos los huevos con una pizca de sal.
Cuando vemos que las rebanadas están bien empapadas las vamos pasando por los huevos batidos.
En una sartén calentamos aceite con la corteza de limón. Cuando esté caliente y antes de que empiece a humear, retiramos la corteza de limón y vamos friendo las rebanadas por tandas.
Una vez doradas por ambos lados las sacamos y dejamos escurrir en el plato con papel absorbente y espolvoreamos con la mezcla de canela y azúcar.
En un cazo calentamos la leche con el café soluble y añadimos el azúcar, la rama de canela y el agua de azahar. Cocemos a fuego suave removiendo hasta que el azúcar se disuelva.
Dejamos entibiar para infusionar sabores.
Colocamos las rebanadas de pan en una fuente y cubrimos con la mezcla de café. Dejamos reposar hasta que empapen todo el líquido, unos 15/20 minutos.
Mientras empapan, batimos los huevos con una pizca de sal.
Cuando vemos que las rebanadas están bien empapadas las vamos pasando por los huevos batidos.
En una sartén calentamos aceite con la corteza de limón. Cuando esté caliente y antes de que empiece a humear, retiramos la corteza de limón y vamos friendo las rebanadas por tandas.
Una vez doradas por ambos lados las sacamos y dejamos escurrir en el plato con papel absorbente y espolvoreamos con la mezcla de canela y azúcar.
Que tengáis un buen comienzo de marzo.
Yo también soy partidaria de hacer en cada momento la receta que corresponda, al igual que se suceden las estaciónes, también los productos propios de ellas con sus respectivas elaboraciones. La torrija ha aguantado su lugar durante siglos, no se cuantos, por algo será. Con café es una versión que no he probado, pero dame tiempo y verás. Seguro que están buenísimas.
ResponderEliminarBss
Ya mismo es tiempo de hacer torrijas, de echo esta semana me comí dos que trajo la compañera de trabajo.
ResponderEliminarEstas tuyas con café me parecen de lo mas ricas, habrá que probarlas!!
Besos y feliz semana
Hola Juan!. Voy a tener en cuneta estas torrijas, han de estar muy buenas.
ResponderEliminarCoincido totalmente en tu texto.
Un abrazo.
Me olvidaba de desearte un buen mes de Marzo y buenas fiestas.
ResponderEliminarHola Juan !
ResponderEliminarRespeto y empatía y este mundo iría mucho mejor, verdad ?
Aunque creo que con tus torrijas todos estaremos de acuerdo en que son una verdadera exquisitez. Me encanta ese toque de café, las probaré.
Un abrazo y feliz comienzo de semana.
Juan es desesperante los niveles de intolerancia que estamos alcanzando, nadie soporta que se le pose una mosca encima, y cuando ese alguien ni siquiera se toma la molestia de informarse como es debido, y va y salta, ahí ya es para mejor ni decirlo.
ResponderEliminarTus torrijas me parecen muy apetecibles, yo soy muy cafetera, y lo suelo tomar solo y sin azúcar, pero si algo lleba café añadido, seguro me gusta, y si lo tengo por delante cae seguro, jajaja...
Unas torrijas deliciosas como las demás, porque en la variedad está el gusto, espantando al aburrimiento.
Besos, feliz semana.
Qué razón tienes, la libertad de uno acaba donde empieza la del otro. Al que le gusta seguir la tradición perfecto y al que no también es perfecto. Por qué han de ser mis ideas mejor que las tuyas o al revés? Cada uno tiene su parte de razón y no hacer daño a nadie es lo importante.
ResponderEliminarY dicho esto, qué ricas están las torrijas y estas que has hecho con el toque de café me parecen geniales para variar.
Besos.
Juan a mi me encanta el pan en dulce.
ResponderEliminarLas torrijas todo un lujo.
yo fue uno de los primeros dulces que veganice por tradición.
1 saludito
Hola Juan!!
ResponderEliminarEn casa seguimos comiendo igual que siempre, solo cuando llegue el Viernes Santo lo respetamos y ese día no comemos carne.
Yo respeto por completo a todos aquellos que tienen sus creencias y que quieran cumplirlas.
Tus torrijas de café me han sorprendido, nunca las he probado así y seguro que me conquistaría el primer bocado ;)
Un abrazo!!
Hay Juan que alivio leerte,últimamente me creía que soy de otro planeta🤦♀️ por la cantidad de imbecilidades que suceden🤷♀️ se sacan muchas cosas de contesto..en fin que será tiempo de disfrutar de las pequeñas cosas verdad?😉pues ya puestos yo disfrutaría de un par de estas ricas torrijas🤤🤤Que tengas una buena pascua😘
ResponderEliminarEs verdad, cada día hay más intolerancia, es algo que me da mucha tristeza y miedo...
ResponderEliminarEn cuanto a las torrijas, de café no las he probado nunca, pero con lo cafetera que soy, seguro que me encantarían. Buenísimas.
Un abrazo.
Juan que ricas de cafe , no las he probado asi que tendre que hacerlas Abrazos
ResponderEliminarQué estupendo aporte Juan para el reto de Marisa, estas recetas tradicionales de aprovechamiento y de hacer comida con lo que había por casa o se podían permitir, me encantan; son sencillas y deliciosas. Esta torrijas de café deben estar de 10, cuando haga haré unas cuantas de esta manera.
ResponderEliminarUn beso
Hola Juan ! unas torrijas muy interesantes ,aunque supongo que a los muy cafeteros les tiene que encantar ,hay que ir innovando las recetas clasicas y esta parece que tienen que estar de 10
ResponderEliminarun abrazo
Hola Juan. Coincidimos en todo. La TV y otros medios son junto con los políticos y los "aborregados" los encargados de manipular y "anti-educar" en la intolerancia, pero solo en lo que a ellos les molesta y cada vez es más.
ResponderEliminarPor eso, aprecio enormemente la tradición y las costumbres.
Tus torrijas so un lujazo que recibo con alegría en 1+/-100.
Mil gracias y un abrazo.
Mi querido Juan, en casa las torrijas siempre se han hecho con leche, salvo contadas ocasiones en las que mi madre las ha hecho de vino, que no están mal, pero como siempre han triunfado las "tradicionales" hace muchísimos años que no ha cambiado la receta.
ResponderEliminarYo en mi casa las he hecho pocas veces, alguna contada para el blog y poco más, ya que cuando me ha entrado antojo, lo he dejado caer en mi casa y mi madre se ha puesto a ello.
He de confesar que el año pasado, estando de baja en casa, dado que Elena era tan dormilona, probé algunas variantes que verán la luz, si no pasa nada este año en mi blog.
Llegar a tu cocina esta semana ha sido darme de bruces con una realidad que por evidente no he sido capaz de ver. Con lo que me gusta el café y jamás se me ha ocurrido pensar en preparar torrijas con él. Cuando las he visto en tu blog se me ha abierto todo un mundo de posibilidades y deseando estoy de probarlas.
Gracias por esta maravillosa receta y por la idea que me llevo rauda a mi cocina.
Por cierto, si mi señor marido no sabe ver la ironía de tu comentario de la pasada semana tiene dos trabajos: enfadarse y desenfadarse, y así ya tiene algo que hacer que lleva casi quince días con el dedo roto y yo no salto por el balcón porque la puerta no me pilla abierta.
Besos mil
Un clásico de la cuaresma,pero con un punto diferente al ponerle el café¡¡¡¡¡
ResponderEliminarMe llevo una para probarla¡¡¡¡
Besitos y feliz semana¡¡¡¡
Que gran idea! Con cafe tienen que estar super deliciosas! Seguro que pruebo tu receta pronto!
ResponderEliminarSaludos Juan!
Juan, qué te voy a decir de lo que pienso de este “desate” general de intransigencia, de falta de respeto, de poca empatía, a mí no se me ocurre ofender a nadie por sus creencias religiosas ni aunque veneren unos tiestos, se trata de respeto que es lo que falta. Esos indultos, criterios en las tertulias, te da la temperatura de la sociedad actual donde solo valen las imbecilidades de un tanto por ciento bastante insignificante. En fin. Ya sabes.
ResponderEliminarBueno, las torrijas, estupendas y diferentes, todo lo que lleve café o chocolate me entusiasma, por eso me gusta tanto el tiramisù. Intentaré probarlas aunque tengo restringido el pan al cero. Yo creo que un día es un día y así las pruebo.
Muchos besos y feliz día, amigo.
¡¡Hola Juan!! Precisamente, cuando más tolerantes y bien avenidos deberíamos ser, más trogloditas nos estamos volviendo. Los que piden nuevas corrientes, no se dan cuenta de que se van volviendo igual de dictadores que lo eran a los que critican hoy en día.
ResponderEliminarY sí, el respeto es muy importante. Tú sabes precisamente que he vivido en lugares poco religiosos, por lo que mi religiosidad es bastante nula, pero respeto al que no quiere comer carne en cuaresma, a que hagan sus dulces tradicionales y el que quiere ir a misa todos los domingos, como al que no va. Además, tener fe en algo es un buen salvavidas para muchas personas, así que no voy a ser yo quién le diga lo contrario.
Y por supuesto, que seguiré comiendo torrijas en Semana Santa, roscón de Reyes para el día de Reyes y todo eso que muchas veces lo tenemos precisamente, gracias a que se celebra algo religioso. Y seguimos teniendo festivos y puentes gracias a las fiestas religiosas, y que las fiestas de los pueblos son siempre porque celebramos sus vírgenes y santos. Lo que es, es, aunque ahora esté todo eso mal visto, y te lo dice una casi, casi agnóstica. Me gustan las tradiciones, precisamente, porque he tenido pocas, y lo valoro mucho más.
Bueno, y ahora voy y te digo que no me gustan tus torrijas, ja, ja, matizo, no me gusta el café, pero yo pronto se lo cambio por una cucharada de cacao y listo, de no gustarme, pasan a que me encantan. Yo tengo muchísimas ganas de que llegue Semana Santa, y hacer unos pocos pasteles de boniato caseros y comerme una o dos monas dulces que están buenísimas. Besitos.
Un par de ellas por favor, madre de Dios que pintaza tienen, yo soy torrijera al máximo jjejejje y me encantan de todos los sabores. Besoss
ResponderEliminarComo me gustan las torrijas!!!, he de probar estas tuyas con el café han de estar de puro y dulce vicio
ResponderEliminarUn abrazo.
Hola Juan, estamos casi en semana santa, vendrán las vacaciones y podremos disfrutar de todas esos dulces típicos de esas fechas. En cuanto a tus torrijas debo decirte que has tenido un gran acierto dándoles ese toque de café. Me encanta!!!! seguro que le dan un toque muy especial. Me ha gustado mucho. besos, querido amigo.
ResponderEliminarPrecisamente esta mañana (que miré rápido.rápido- la lista de lectura, le dije a mi marido que había visto unas torrijas de café, que seguro que le encantarían (porque es muy cafetero, y también me aficionó a mí hace años) y ahora que ya puedo repasar con más tranquilidad me encuentro que son tuyas! qué bien! garantía de calidad! Cuánto apetecen estos dulces tan propios de la cuaresma y Semana Santa.
ResponderEliminarUn abrazo
Nunca he probado las torrijas así, pero tienen que ser un vicio! me encanta el café, y a las torrijas también le hago fiestas, así que...caerán seguro Juan!
ResponderEliminarUn saludo!
Juan hay épocas en las que he hecho recetas acordes con el tiempo y otras en las que no, pero realmente no tengo un motivo especial. Voy compartiendo recetas según hago en casa y poco más.
ResponderEliminarEn cuanto a tus torrijas, decirte que no soy muy amante del café, pero cuando se trata de un postre la cosa cambia, entonces sí que me lo tomo a gusto, como a gusto me comería unas cuantas de tus torrijas, seguro que me encantarían, porque le has dado un toque muy original con este sabor.
Abrazos y buen fin de semana!!!
Hola Juan, lo primero que quiero es disculparme por mi ausencia de visitas , pero realmente no llego a todo. Me he planteado darle el cierre al blog, pero no puedo, se que seguiré cocinando asi que he pensado que lo mejor es estar ausente y cuando pueda apareceré.
ResponderEliminarComo hoy dispongo de una tarde ya libre, paso a visitar a los blogs amigos.
Yo siempre que puedo sigo las tradiciones y costumbres, aunque no me cierro a cosas exportadas, nuevas o de otros paises. Desde luego tus torrijas son una delicia, y deberían de recetarlas en la seguridad social.
Son muy originales y deben estar fabulosas. Tienes todo un catálogo de torrijas a cual más rica.
Que pases un buen fin de semana
Un beso.
salut juan
ResponderEliminarversion café ça ne peut être que bon j'adore l'odeur du café à tester
bonne soirée
recuerdos traes a mi memoria cuando era chica y mi abuela las cocinaba
ResponderEliminardeliciosamente fritas
Unos postres que entusiasman cuando los hago... pero los hago muy poco...son una bomba calórica 🤣🤣🤣
ResponderEliminarPtnts
Glòria
Juan muy originales y seguro que ricas hay que probarlas, me encanta el hacer torrijas de distinto sabores, besos
ResponderEliminarHola Juan,,,,te quedo alguna para mi????...me rechiflan,que buena receta!!! no hay que perder las tradiciones ,un saludo.
ResponderEliminarHola Juan, en mi vida he hecho torrijas y creo que tampoco las he probado, cada año cuando leo alguna receta acerca de este poste, me digo: "De este año no pasa", pero luego pasan los días y la Cuaresma y ya no me vuelvo a acordar.
ResponderEliminarA mi no me parece de otros tiempos seguir las tradiciones, al contrario creo que sería una pena olvidarlas, yo no hago torrijas porque en mi familia no había costumbre de hacerlas, pero en cambio todos los años me esmero en preparar la Mona de Pascua.
Hasta pronto, un abrazo
Creo que con sabor a café me iban a encantar, además me da que es una de esas cosas que si te las ponen delante no pararías de comer.
Mil gracias por acordarte de mis pucheros.
ResponderEliminarDe momento tengo apagados mis fogones, al aniversario de mi amiga virtual Ámbar, se sumó la pérdida de otra amiga que conocí al poco de casarme y me ha dejado con tan pocas ganas de escribir, que he decidido tomarme un descanso y esperar a que regrese la inspiración.
Últimamente no comento a nadie, sólo lo hago a aquellos que me dejáis unas letras preguntando o recordándome y, como no quiero herir a nadie, es por esta razón que te contesto en una entrada anterior.
Me han encantado tus torrijas y esas habas tienen que estar para chuparse los dedos.
Con mis mejores deseos, te mando cariños.
Kasioles
Hola, Juan:
ResponderEliminar¿Cómo estás? Espero que tú y toda tu familia estén muy bien. No te haces una idea de cómo me gustan las torrijas. Un postre tan humilde y que para mí es una auténtica delicia. Ya con una bola de helado al lado, ni te cuento. Estas tienen una pinta estupenda. Yo me las pido sin café, que no lo puedo tomar. Pero me llevo unas cuantas con café para mi marido que sí que le gusta el café.
Un beso y feliz fin de semana.